Benéficos para la salud: al cuidar tu corazón, también cuidas tus riñones
Pacientes con enfermedades cardíacas crónicas enfrentan un riesgo considerablemente mayor a desarrollar enfermedad renal y viceversa. Cuida tu corazón y de paso el resto de tus órganos.
Las enfermedades del corazón son la principal causa de muerte en los mexicanos, el país se enfrenta a una creciente carga de enfermedades cardiovasculares, siendo éstas las responsables de más del 20 por ciento de las defunciones, según estadísticas de la Secretaría de Salud.
En 2021 perdieron la vida 220 mil personas debido a un padecimiento cardíaco, cifra que lo ubica como la principal causa de decesos en personas de más de 55 años.
Del total de fallecimientos por problemas cardiovasculares, el 80 por ciento correspondió a enfermedad coronaria o cardiopatía isquémica; relacionados con la ocurrencia de una obstrucción del flujo sanguíneo al corazón, lo que derivó en infarto agudo al miocardio o angina de pecho.
Numerosas publicaciones, como lo mostrado en las recomendaciones de la Asociación Americana del Corazón, respaldan la relación entre la Enfermedad Cardiovasculares y las enfermedades renales.
Pacientes con enfermedades cardíacas crónicas enfrentan un riesgo considerablemente mayor de desarrollar enfermedad renal y viceversa. Este dilema clínico requiere soluciones específicas que atiendan de manera integral ambas condiciones médicas.
La urea es una sustancia que se forma por la evaluación de proteínas en el hígado. Los riñones filtran la urea de la sangre hacia la orina. Según algunos estudios, la urea representa un factor de riesgo cardiovascular no tradicional en pacientes con Enfermedad Renal Crónica (ERC).
Una de las estrategias para reducir los niveles de urea en sangre, además del tratamiento médico, es mantener una microbiota intestinal saludable y cuidar la cantidad de proteínas de la dieta.
La comunidad médica, investigadores y la industria farmacéutica en México están colaborando para desarrollar soluciones integrales que atiendan estas condiciones médicas.
Dieta baja en proteínas
El mantener una dieta baja en proteínas beneficiará al paciente con ERC al disminuir la presión al riñón permitiendo una ralentización de la progresión de la ERC y disminución de la proteinuria, explicó la especialista en nefrología, Nadia Saavedra.
Preservar la función renal es uno de los objetivos prioritarios en la práctica clínica. La estrategia más eficaz para reducir la morbimortalidad cardiovascular en el ERC es apuntar a las medidas terapéuticas y preventivas a los pacientes a los que se les ha detectado de manera temprana.
El tratamiento de la Enfermedad Renal Crónica es multidisciplinario ya que debe ser vigilado por un nefrólogo, psicólogo y muy importante un nutriólogo renal como parte de las estrategias de cuidado y seguimiento del paciente, es fundamental.
Factores que ayudan a controlar la progresión de la ERC:
1. Mejorar los niveles de glucosa en la sangre.
2. Control adecuado de la hipertensión arterial.
3. Disminuir la cantidad de proteína en la dieta.
4. Reduzca el consumo de sodio.
5. Evitar el sedentarismo.
Mayo Clinic, explica que los riñones filtran los desechos y el exceso de líquidos que hay en la sangre, los cuales se desechan en la orina. Cuando los riñones pierden la capacidad de filtrar, pueden acumularse niveles nocivos de líquido, electrolitos y desechos en el cuerpo.
En la enfermedad renal en etapa terminal, se requiere un tratamiento sustitutivo llamado diálisis o hemodiálisis, pero sin duda la curación es un trasplante de riñón para mantenerte con vida.
Sin embargo, se deben tomar medicamentos para el resto de la vida para evitar el rechazo del órgano, por eso la necesidad y urgencia de los especialistas en salud de prevenir esta enfermedad.