El aumento de Data Centers en todo el mundo ha causado un enorme impacto negativo en el medio ambiente
Con la gran demanda de información computacional y electrónica, tanto el número como el tamaño de los centros de datos están aumentando en todo el mundo. Sin embargo, estos grandes centros están dañando el medio ambiente debido a su elevado consumo de agua.
Los Data Centers, o centros de datos, están surgiendo en todo el mundo para hacer frente a la gran demanda de información proveniente de la creciente red de dispositivos electrónicos, como teléfonos celulares, computadoras y tabletas, que forman parte de la vida diaria de la mayoría de las personas y también de la economía global. A pesar de ser necesarios y representar un enorme avance tecnológico, estos grandes centros de datos han tenido un gran impacto negativo desde una perspectiva sostenible y climática.
Durante años, las empresas que operan centros de datos se han enfrentado a grandes desafíos relacionados con la alta demanda de electricidad que utilizan los dispositivos electrónicos para almacenar y mover información digital, pero poco se sabe o se dice sobre el consumo de agua de estos centros. Pero, ¿por qué es relevante el consumo de agua en estos centros? El agua es el principal elemento que conforma el sistema de refrigeración de estos lugares, que se sobrecalientan debido al alto procesamiento de datos.
Una encuesta realizada en 2023 por el Uptime Institute encontró que solo el 39 % de los centros de datos realizan un seguimiento de su uso de agua, lo que significa que el consumo de agua no es una preocupación para las Big Tech: grandes empresas de tecnología que tienen sus propios grandes centros de datos.
Sustainalytics, que evalúa los riesgos relacionados con cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza (ESG), dijo recientemente que analizó 122 empresas que operan centros de datos y descubrió que solo el 16 % reveló información sobre sus planes para gestionar los riesgos relacionados con el agua.
Un gran dilema entre las empresas que administran centros de datos es elegir cómo van a mantener frías sus torres de procesadores y para ello existe la posibilidad de consumir menos agua y usar más electricidad o pueden usar menos energía y consumir más agua. Como podemos imaginar, la elección les resulta fácil, ya que el agua es un recurso mucho más barato.
Según el Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley, un centro de datos de tamaño mediano consume un total de alrededor de 300.000 galones de agua por día, o el equivalente al consumo de mil hogares en Estados Unidos (EE.UU.). Su consumo directo in situ ubica a los centros de datos entre los 10 principales usuarios de agua en los sectores industrial y comercial de EE.UU.
Un ejemplo de este alto consumo es el futuro centro de datos de la empresa Meta, ubicado en Talavera de la Reina, España. Según el proyecto, se deberían utilizar 665 millones de litros al año. Ésta es la cantidad de agua que consume al año una ciudad de 10 mil habitantes. En situaciones de calor máximo, este servidor necesitará unos 195 litros por segundo para enfriar sus componentes electrónicos.
En el momento actual que vivimos, con los efectos del calentamiento global cada vez peores y más evidentes, especialmente con el aumento de la ocurrencia de eventos de sequía extrema, comienzan a surgir conflictos entre los dueños de estas empresas tecnológicas y las comunidades que viven cerca de sus centros de datos. Países como Chile , Uruguay y parte de EE.UU. ya enfrentan este tipo de situaciones. En otros lugares más fríos, como Irlanda y los Países Bajos, el desarrollo de nuevos centros de datos se ha visto bloqueado debido a estas preocupaciones sobre el consumo de energía y agua.
Medidas para controlar el consumo de agua en los centros de datos
A partir de marzo de este año, la Comisión Europea exigirá a las empresas que pongan a disposición del público datos sobre su consumo de energía y agua. En el Reino Unido, la empresa de servicios públicos Thames Water está investigando cuánta agua utilizan los centros de datos de la ciudad de Londres para evaluar el ajuste de precios para estas empresas que consumen mucha agua.
En España, la empresa Meta afirma que recicla el agua utilizada en sus instalaciones y que ha reducido el nivel de humedad controlada en las salas de datos donde utiliza refrigeración evaporativa directa, reduciendo el consumo de agua entre un 10 % y un 65 % en estas instalaciones.