Pronóstico: ¿cómo evolucionará en 2024 la concentración atmosférica global de dióxido de carbono?

El Met Office, el servicio meteorológico del Reino Unido, realiza cada año una estimación del comportamiento esperable de concentración de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera. Sus previsiones en años anteriores siempre han sido muy ajustadas a lo que finalmente se mide, por lo que son muy tenidas en cuenta por la comunidad meteorológica mundial.

Hay que recordar que el CO2 es el principal gas de efecto invernadero en la atmósfera. Entre 65 % y 80 % de CO2 que se libera a la atmósfera se disuelve en el océano y permanece allí durante un período de entre 20 y 200 años. El porcentaje restante se elimina lentamente, gracias a procesos que pueden durar cientos de miles de años, procesos como la meteorización química o la formación de rocas. El metano es otro de los gases de efecto invernadero con un poder mayor que el CO2, pero con una tasa de persistencia mucho menor.

En el caso del metano, su persistencia en la atmósfera es de aproximadamente una década. El tercero en importancia, el óxido nitroso, alcanza los 120 años. Dicho esto para comprender el contexto, Met Office avisa que e prevé que el aumento del CO2 atmosférico entre 2023 y 2024 sea más rápido que el necesario para cumplir los escenarios del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC) que limitan el calentamiento global a 1,5 °C.

El efecto de El Niño sobre el CO2

El punto de referencia de concentración de CO2 es el monte Mauna Loa, Hawai. Allí es donde se realizan las mediciones diarias de concentración de este gas con la serie más larga a nivel global.

El actual aumento del CO2 se debe principalmente a la quema de combustibles fósiles y al cambio en el uso del suelo. Sin embargo, actualmente existe un impacto adicional, ya que El Niño provoca un debilitamiento temporal de los sumideros de carbono de las tierras tropicales. Zonas que normalmente absorberían parte del carbono liberado tendrán una capacidad reducida debido a los efectos de El Niño.

El profesor Richard Betts es el autor del trabajo realizado por Met Office, e indica que "el aumento estimado para este año de la concentración atmosférica de dióxido de carbono está muy por encima de los tres escenarios compatibles con 1,5 ºC señalados en el informe del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC). Incluso cuando compensamos los efectos temporales de El Niño, constatamos que las emisiones de origen humano seguirían provocando que el aumento del CO2 en 2024 se sitúe en los límites absolutos del cumplimiento de las trayectorias de 1,5 °C."

Met Office prevé que la concentración media anual de CO2 en Mauna Loa, Hawái, será 2,84 ± 0,54 partes por millón (ppm) superior en 2024 que en 2023. Como resultado, la previsión sugiere que la concentración media anual de CO2 en 2024 en Mauna Loa será de 423,6 ± 0,5 ppm. Más allá de todo, lo cierto es que el escenario apunta a una suba sostenida en la concentración de CO2 en la atmósfera.

Futuro incierto

Richard Betts también añade que "el aumento del CO2 atmosférico se ha acelerado en las últimas seis décadas. Para que el calentamiento global se mantenga por debajo de 1,5 °C, el ritmo de acumulación de CO2 en la atmósfera tendría que ralentizarse sustancialmente en los próximos años y detenerse por completo antes de mediados de siglo. La previsión para 2024 no muestra tal ralentización".

Si se observan los cambios anuales, el aumento más rápido de la concentración de CO2 previsto para este año (línea roja) está muy por encima del cambio anual necesario para seguir los tres escenarios ilustrativos clave compatibles con 1,5 °C del gráfico anterior. El aumento más rápido en 2024 está asociado al debilitamiento de los sumideros de carbono debido a El Niño, que seca los bosques tropicales y afecta a su capacidad para absorber dióxido de carbono, por lo que se espera que sea temporal.

No obstante, si se excluye este efecto (como muestran la línea verde oscura y la mancha verde del gráfico anterior), las emisiones de origen humano seguirían provocando un aumento del CO2 en 2024 muy por encima de la tasa necesaria para seguir el escenario de 1,5 ºC de "baja demanda energética", y en el extremo superior del intervalo de incertidumbre de los otros dos escenarios de 1,5 ºC. El nivel actual de calentamiento global es de aproximadamente 1,3 ºC. Aunque la temperatura global en 2023 fue casi 1,5 °C superior a la de la era preindustrial, lo que lo convirtió en el año más caluroso jamás registrado, el ciclo natural de El Niño se sumó temporalmente al calentamiento inducido por el hombre. Por tanto, las temperaturas récord de 2023 no representan una superación de los 1,5 °C de calentamiento global de origen humano, según Met Office.