Pirámide en la Antártida: una montaña simétrica genera teorías conspirativas pero su desarrollo tiene una explicación
En la Antártida hay una extraña montaña piramidal con cuatro caras casi idénticas. Esto ha despertado todo tipo de teorías conspirativas, especialmente asignándole un origen extraterrestre. Aquí te contamos cómo su desarrollo tiene una explicación geológica y se parece al de otras montañas similares.
En la Antártida se encuentra una montaña muy especial con forma de pirámide perfecta, lo que ha generado desde que se lo conoce todo tipo de historias conspiranoicas. Pero sus cuatro caras simétricas fueron forjadas mediante procesos naturales, algo que científicamente se ha podido probar oportunamente.
“Una base de investigación para científicos del clima se encuentra justo al sur de la montaña piramidal en un área llamada Patriot Hills. Desde allí, según las condiciones, se puede ver esta montaña!. " (Mauri Pelto, profesor de ciencias ambientales en el Nichols College en Dudley, Massachusetts).
La montaña se encuentra escondida en medio de una mar de nieve en la Antártida, tal como relata Live Science. En realidad se parece mucho a una antigua pirámide egipcia cuando se la ve desde arriba, ya que sus cuatro caras aparecen notoriamente simétricas. Es por ello que muchos piensan que esa forma se ha logrado por manos extraterrestres, o por humanos de manera secreta para todo tipo de fines.
Lo cierto es que la montaña ha tomado esa forma mediante un lento y desgastante proceso de erosión. A través del mundo hay muchas montañas o formas geológicas que parecen desafiar a las leyes de la física. En este caso, la montaña piramidal, que no tiene otro nombre más que ese, se hizo famosa en Internet en 2016, pero los científicos probablemente sabían de su existencia antes de esa fecha.
Cientos de millones de años de erosión
En concreto, esta montaña piramidal tiene unos 1.265 metros de altura, algo menos de un 20 % de la altura del Aconcagua. Tiene cuatro laderas empinadas y está situada en las montañas Ellsworth del sur, una cadena de picos irregulares avistados por primera vez durante un vuelo del aviador estadounidense Lincoln Ellsworth en 1935. Esto es relatado en un artículo de investigación del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) publicado en 2007.
Éste es el misterio detrás de la pirámide egipcia de la Antártida.
— Plano Informativo (@Planoinforma) February 11, 2024
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Las montañas Ellsworth son una cordillera con una extensión que supera los 400 km, de las más grandes de la Antártida. La región es conocida por albergar fósiles de trilobites y otras criaturas de 500 millones de años de antigüedad que datan del período Cámbrico de hace entre 541 y 485,4 millones de años. El doctor Mitch Darcy, geólogo del Centro Alemán de Investigación de Geociencias en Potsdam y mencionado por Plano Informativo indica que “por definición, es un nunatak, que es simplemente un pico de roca que sobresale sobre un glaciar o una capa de hielo”.
Es probable que las laderas de la montaña hayan sido talladas y alisadas hasta tener una forma similar a una pirámide por cientos de millones de años de erosión. En concreto, las rocas pueden haber estado sujetas a la erosión por congelación y descongelación, que es cuando el agua y la nieve llenan pequeñas grietas durante el día y luego se congelan por la noche, dijo el profesor Pelto. El agua se expande en las grietas a medida que se congela, lo que hace que los huecos se agranden bajo la presión resultante y, finalmente, haga que grandes trozos de roca se desprendan de la montaña.
Erosión por congelación y descongelación
Los científicos han logrado establecer que tres de los lados de la montaña piramidal se han erosionado al mismo ritmo, mientras que el cuarto lado, la cresta oriental, se formó de forma independiente. Pelto también mencionó que la erosión por congelación y descongelación probablemente también forjó otras montañas piramidales, como el Cervino en los Alpes suizos.
En 2016 la imagen de la montaña piramidal en la Antártida se hizo viral en Internet y desde allí surgieron decenas teorías de conspiración para explicar la forma de la montaña piramidal de la Antártida. Varias de esas teorías señalaron la participación de una civilización olvidada o extraterrestres del espacio exterior. O que fue parte de un plan secreto de algún país.
Pero según Eric Rignot, profesor de ciencias del sistema terrestre en la Universidad de California, Irvine y científico investigador principal del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, en diálogo con Live Science, "esta es solo una montaña que parece una pirámide. Las formas piramidales no son imposibles: muchos picos se parecen parcialmente a pirámides, pero solo tienen una o dos caras como esa, rara vez cuatro". El clima más hostil en la Antártida en la última etapa del desarrollo del planeta habría ayudado a una erosión más efectiva.