Planeta en alerta: ya se han superado 6 de los 9 límites medioambientales planetarios
Seis de los nueve componentes medioambientales responsables de que el medio ambiente sea habitable han sido violados y funcionan en un estado de alto riesgo. Esto indica que el planeta está al borde del colapso.
Durante los últimos 3.000 millones de años, la interacción entre los seres vivos y el clima ha controlado las condiciones medioambientales de todo el planeta. Incluso cuando hablamos sólo de seres humanos, nuestra actividad siempre ha tenido un impacto significativo en el planeta.
Para que estas actividades humanas no desencadenen cambios drásticos en el medio ambiente y el clima, es necesario respetar las interacciones con el planeta y mantenerlas dentro de unos umbrales aceptables.
Sin embargo, un nuevo estudio publicado el mes pasado en Science Advances demuestra que, por desgracia, eso no es exactamente lo que está ocurriendo: estamos al borde del colapso.
Los 9 límites planetarios
El estudio identificó nueve límites o umbrales planetarios, que representan componentes del entorno global responsables de regular la habitabilidad del planeta. En términos sencillos, cuanto más se violen estos componentes, más inhóspito se volverá el planeta para nosotros.
Cuando un componente supera el límite de funcionamiento seguro (el límite planetario), se convierte en un riesgo que puede poner en peligro la supervivencia de los seres humanos.
Y por desgracia, según el estudio, seis de los nueve componentes enumerados ya han superado el límite de funcionamiento seguro. Ellos son:
- Introducción de nuevos compuestos (sintéticos) en el medio ambiente.
- Cambio climático: concentración de CO2 y forzamiento radiativo de la atmósfera.
- Integridad de la biosfera: factores genéticos y funcionales.
- Cambios en los sistemas forestales de todo el planeta.
- Cambios en el agua dulce disponible: en el suelo, subsuelo y en las plantas.
- Flujo bioquímico: flujos de nitrógeno (N) y fósforo (P).
Los tres componentes que siguen funcionando dentro del umbral de seguridad son:
- Acidificación de los océanos.
- Destrucción del ozono en la estratosfera.
- Deposición de aerosoles en la atmósfera.
Cruzar una frontera planetaria no significa por sí mismo que vaya a producirse una catástrofe. Pero es una señal de alarma. Es casi como si midiéramos la presión arterial del planeta: una presión superior a 12/8 no garantiza un infarto, pero aumenta considerablemente el riesgo de sufrirlo.
Los resultados de este estudio ponen de relieve la importancia de desarrollar modelos capaces de analizar la interacción entre distintos límites planetarios, que no se limiten únicamente al cambio climático.
Y, por supuesto, el estudio también demuestra que necesitamos limitar urgentemente nuestro impacto sobre el medio ambiente si no queremos que la Tierra sufra un infarto. Tenemos que actuar, y rápido.