Revelando los secretos del comportamiento espacial colectivo de los murciélagos
Explore cómo los cerebros de los murciélagos frugívoros egipcios procesan el comportamiento espacial colectivo, arrojando luz sobre la cognición social en los animales.
Imagínese navegar por una ciudad abarrotada, con gente moviéndose a su alrededor, autos tocando bocinas y señales sensoriales bombardeando sus sentidos. En un entorno tan complejo y dinámico, ¿cómo puede realizar un seguimiento de su propia posición y de la de los demás? Bueno, resulta que los murciélagos podrían tener la clave para desbloquear los misterios del comportamiento espacial colectivo.
La complejidad del comportamiento espacial colectivo
Investigaciones recientes han profundizado en el fascinante mundo de los murciélagos frugívoros egipcios para comprender cómo sus cerebros procesan la información espacial cuando navegan por el mundo. Científicos de la Universidad de California en Berkeley comparten su investigación, que ofrece información intrigante sobre la actividad neuronal de los murciélagos cuando participan en un comportamiento espacial colectivo.
Los seres vivos, desde humanos hasta animales, a menudo coexisten y se mueven dentro de espacios ocupados por otros. Ya sea para encontrar comida, evitar a los depredadores o simplemente interactuar socialmente, la capacidad de navegar en entornos complejos y con múltiples agentes es crucial para la supervivencia.
Este estudio "escucha" la actividad cerebral que se produce en el hipocampo, una región del cerebro que se sabe que está involucrada en la memoria espacial y la navegación.
Los extraordinarios murciélagos frugívoros egipcios
Para estudiar el comportamiento espacial colectivo en un contexto natural y etológicamente relevante, los investigadores recurrieron a los murciélagos frugívoros egipcios. Estos murciélagos son criaturas muy sociales y pasan su vida negociando espacios junto con muchos otros murciélagos. Exhiben claras preferencias sociales y espaciales, lo que los convierte en un sujeto ideal para esta investigación.
La investigación implicó reunir grupos de 5 a 7 murciélagos frugívoros egipcios y permitirles volar libremente en una gran sala de vuelo. Los murciélagos fueron rastreados en tiempo real utilizando un sofisticado sistema de localización, lo que permitió a los investigadores monitorear sus posiciones y movimientos con notable precisión.
Curiosamente, los murciélagos mostraron un comportamiento colectivo estructurado. En lugar de congregarse en las fuentes de alimento, a menudo volaban entre sitios de descanso elegidos por ellos mismos, que frecuentemente estaban ocupados por otros murciélagos. Esto resultó en el surgimiento de un comportamiento espacial grupal altamente estructurado, donde combinaciones específicas de individuos, ubicaciones y patrones de movimiento definieron la dinámica colectiva.
Representación social a nivel poblacional
Para comprenderlo aún mejor, los investigadores estudiaron la actividad neuronal de estos murciélagos durante el comportamiento espacial colectivo. Lo lograron utilizando imágenes inalámbricas de calcio para registrar la actividad neuronal en el hipocampo dorsal de los murciélagos. Descubrieron que muchas neuronas estaban activas durante los vuelos y una subpoblación de estas neuronas cambiaba su actividad en función de la naturaleza social de los vuelos.
Esta modulación social se extendió al nivel de la población, con una actividad de conjunto distinta para vuelos sociales versus no sociales. Curiosamente, incluso un número relativamente pequeño de neuronas socialmente moduladas podría usarse para decodificar con precisión la presencia o ausencia de otro murciélago en un lugar de aterrizaje.
Más aún, cuando había otro murciélago presente en un lugar de aterrizaje, la actividad neuronal indicaba la identidad del murciélago hacia el que volaban, lo que convierte a este en uno de los pocos estudios que revela la representación de la identidad en un cerebro que no es primate.
Implicaciones y direcciones futuras
El estudio arroja luz sobre la notable capacidad de los murciélagos frugívoros egipcios para navegar en entornos sociales complejos. Proporciona información valiosa sobre cómo el hipocampo, una región del cerebro tradicionalmente asociada con la memoria espacial, también desempeña un papel crucial en el procesamiento de la información social.
Además, este estudio allana el camino para la investigación comparativa entre diferentes especies, ofreciendo la posibilidad de descubrir los mecanismos neuronales detrás de los comportamientos colectivos en varios animales. Comprender cómo las diferentes especies navegan e interactúan en entornos grupales puede proporcionar información valiosa sobre la evolución y diversidad de los comportamientos sociales.